martes, 26 de febrero de 2008


AUTORRETRATO

Me siento muy cómoda con los números 2 y 6 que componen la fecha de mi nacimiento. El 6 me acuna y el 2 me parece dulce y dócil. 26 del 2 del 62. No creo mucho en los horóscopos pero el mío me gusta: Piscis. Porque me encanta el mar, los delfines, tomar el sol, pasear por la arena con los pies descalzos.
Desde pequeña he caminado por casa sin zapatos y también desde pequeña he tenido que oír de boca de los más mayores que no era bueno, sobre todo si era invierno o si estabas con la regla. Yo desoía los comentarios, sonreía y calzaba con alegría y desenfado las plantas de pie más sucias de todo el mundo mundial.
Me gusta la desnudez.
Y ahora os hablaré de los ojos. Haciendo gala de una falsa modestia debo deciros que los tengo hermosos. Son verdes y grandes. Verdes, herencia de mi padre. Grandes porque los abro con verdadera fruición para ver y conocer a las personas. Camino por la calle, viajo en autobús, ando por los pasillos de mi trabajo mirando a los ojos de la gente y del cruce de esas miradas, han surgido encuentros muy sabrosos. ¡Cómo me gusta hablar con las personas¡.¡ Cómo me gusta escuchar sus historias, sus vidas¡. Y cuando las miradas son insuficientes para transmitir utilizo las manos y abrazo, toco, palpo, aprieto, acaricio.
Las manos también me han sido de gran ayuda en el tránsito por mi vida. Las manos como instrumento que canalizaban por medio de cartas mi comunicación con familiares y amigos. Amén de notitas dejadas aquí y allá, felicitaciones de cumpleaños o Navidad, postales enviadas desde todos los lugares a donde he viajado, cartas de amor y desamor, cartas de encuentros y desencuentros, cartas de desahogo, de apoyo, de amistad, de reconocimiento, de disculpas… A fuerza de practicar el arte epistolar perdí la costumbre de hablar. No temáis, no soy muda ni autista pero sí he caído en el defecto de no saber solucionar los problemas cotidianos como casi todo el mundo hace, hablando. Se me acelera el corazón, me tiembla la voz, me dan ganas de llorar … y termino escribiendo para aclarar lo que pienso o siento. Me desinhibo totalmente ante un folio en blanco. Me vuelvo descaradamente sincera y serena.
Mis colores favoritos: el blanco, el verde y el azul. Quizás en otro orden.
Soy miedosa y no lo soy. Ahora lo soy más. O tal vez no. Me dan pánico los “roedores”, la lluvia cuando voy en coche o en lo alto de una montaña durante una excursión. Me asusta la enfermedad y el dolor. Creo que no he sido madre precisamente por eso y eso duele.
Mi gran pasión: leer novelas. De poesía, sólo Benedetti me llega. El teatro apenas lo he probado. No podría nombraros mi obra favorita porque casi todas las que me conmueven se convierten en la favorita cuando estoy con ellas. En estos momentos tengo en la mesita de noche “La marea hambrienta” de Amitav Ghosh que descubrí por pura casualidad mientras practicaba otra de mis aficiones preferidas: pasear por las librerías , hojear libros y comprarlos. Lo de leer en el ordenador aún no me seduce. Casualmente también los delfines son protagonistas de la obra. El anterior: “Juntos, nada más” de Anna Gavalda.
A mi profesión llegué por amor. Me enamoré perdidamente de mi profesor de francés con 14 años y desde entonces tuve claro que era eso a lo que quería dedicarme. No me arrepiento en absoluto. Después de catorce años como profesora de francés puedo deciros que me sigue ilusionando como el primer día. El contacto con los alumnos a los que trato de enseñar no sólo la asignatura sino también y sobre todo las buenas formas, el respeto…la “transversalidad” hace que llegue cada mañana al instituto contenta, motivada, expectante también por ver qué me enseñarán ese día ellos a mí.
El deporte ha ocupado y sigue haciéndolo una parte importante en mi vida. De pequeña formaba parte de un equipo de voley ball y posteriormente he dio practicando bicicleta, tenis, footing, aerobic, danza…
¿Mis principales virtudes? Tendría que sondear entre los allegados para confirmar que soy…(titubeo) tranquila, paciente, generosa, detallista, cariñosa…
¡Andad a preguntarle vosotros mis defectos¡
Es broma. Excesivamente puntual soy poco transigente con los retrasos, excesivamente respetuosa con el sueño de los demás me pongo de un humor de perros cuando me despiertan con ruidos “innecesarios”. Me cuesta verbalizar los enfados y eso hace que me duren más, lo que no debe ser cómodo para los que me rodean. ¡Flexibilizar un poco mi manera de ver la vida no me vendría mal¡.
Reflexión interna: ¿Qué configura el retrato de una persona?¿ el físico, el carácter, las aficiones, la personalidad, los fantasmas…? ¿Qué quieren oír-saber los demás de mí? ¿ Nos bloquea desvelar ciertos aspectos de nuestra vida y los obviamos? ¿La introspección nos asusta? En un intento de deslumbrar a los posibles lectores ¿forzamos las ideas, las descoyuntamos y dejamos de describirnos como realmente somos?. En cualquier caso me encanta estar aquí, ahora, escribiendo, sabiendo que alguien lejano a mi vida hasta este momento va a leerme y a empezar a conocerme y sobre todo que tendré la oportunidad de conoceros a vosotros, mis queridos desconocidos, en breve.


Mi príncipe. El más divertido, listo y guapo


domingo, 24 de febrero de 2008

Fin de semana brumoso o cómo celebrar de nuevo mi cumpleaños


La niebla ha sido el principal protagonista del fin de semana. Una niebla espesa que ocultaba el paisaje. Una niebla espesa que desdibujó la tristeza por una pérdida. Ya descansas en paz, mi querida Esperanza. Una niebla espesa y húmeda que nos hizo disfrutar más del interior, de la convivencia. Una mezcla extraña de calma y pesar.

domingo, 17 de febrero de 2008

Con mi amiga Marta, celebrando nuestro cumpleaños

Este fin de semana he estado en Córdoba para celebrar con algo de antelación mi cumpleaños. Marta, mi amiga, cumple el mismo día que yo y decidió que lo pasáramos juntas con una actividad que tanto a ella como a mí, nos encanta: bailar. Danzas del mundo. Danzas que hicieron que nos conociéramos hace ya algunos años en la sierra de Sevilla haciendo un curso de shiatsu.
Antes y después apagar las velitas, danzamos y danzamos.

sábado, 9 de febrero de 2008

AÑORANZAS


EXTRAÑO

Extraño los atardeceres de las playas gaditanas
Extraño el aire limpio en la ciudad
Extraño los campos sanguíneos de las amapolas
Extraño la transparencia del agua en las costas catalanas
Extraño el bombeo del corazón al pedalear
Extraño a los amigos a los que no veo
Extraño mi vida sin papá

GOZO

Gozo del calor que me infunde mi familia
Gozo al sentiros tan cerca
Gozo con las satisfacciones que me procura mi trabajo
Gozo con la naturaleza
El sol
El viento
La lluvia
Gozo con mi naturaleza
Alegre
Optimista
Sana

AÑORO

Añoro un mundo más justo
Añoro la paz en cada rincón de este planeta

Añoro la felicidad de los niños y de los ancianos
Añoro más dosis de alegría y de optimismo
Sabiendo apreciar cada instante que nos procura la vida